Llegan las deseadas vacaciones de verano. Esas que has preparado con tantas ganas y que llevas esperando durante varios meses. O quizás no has tenido mucho tiempo para preparar y pretendes improvisar a la carrera.

Sea cual sea tu caso, lo importante es que ya están aquí. Las más esperadas. Las vacaciones de verano. 

Aunque tengas vacaciones en otras épocas del año, no son nunca iguales que las de verano.

Con las vacaciones estivales llega el propósito de todos los años: desconectar del trabajo. 

Después de una largo año esperando para disfrutar de ellas, puede que no te sientas capaz de dejar atrás tus responsabilidades en el trabajo y que tus pensamientos no te permitan liberarte, aunque sea durante unos pocos días, de seguir pendiente de tus asuntos y actividades laborales.

Desconectar del trabajo en verano para conectar con el presente en tus vacaciones, es la mejor opción para regresar recargado, descansado y sin sufrir el síndrome postvacacional

Es necesario lograr esa desconexión del trabajo y reconectar contigo, recargarte y volver a conectar al regreso, con más fuerza, con una mente más fresca y descansada.

Trabajar durante un año puede ser largo y duro, pero igual que te tomas en serio aprender tus responsabilidades laborales, tienes que tomarte en serio este descanso y aprender a desconectar de tu trabajo.

Esta desconexión es necesaria para mantener un buen nivel de energía

¿Por qué necesitas desconectar en verano?

Desconectar en vacaciones es necesario. Son muchas las personas que reconocen que no sienten la desconexión con el trabajo durante estos días. 

La mayoría siguen conectados a las tecnologías, ya sea respondiendo correos electrónicos, revisando las redes sociales o atendiendo llamadas telefónicas, que te mantienen pegado a tus obligaciones profesionales, aun estando en tu período de permiso laboral.

Es necesario, en este tiempo libre, no seguir esclavizados del teléfono móvil, las tabletas o los ordenadores, y apartarlos durante las vacaciones para poder disfrutar de este merecido descanso.

Sobre todo si se trata de personas que obstentan puestos directivos, jefes de equipo o personas con grandes responsabilidades y cargas laborales, que piensan que ir sacando algo de trabajo durante las vacaciones les va a beneficiar a su regreso.

Y es todo lo contrario, a su vuelta se van a encontrar con el mismo trabajo o más que si no hubieran hecho nada durante esos días, porque han seguido alimentando la faena, y su mente no ha desconectado y reconectado con el momento de descanso que tanto necesita.

La desconexión permite recargarse para la reincorporación

Recomendaciones FAMES para desconectar

Desconectar durante un tiempo, es bueno tanto para ti como para la empresa. A ti te permitirá disfrutar al cien por cien de las experiencias que tengas en tus vacaciones y la empresa ganará una persona más eficiente y productiva a tu vuelta.  

Además de reducir el nivel de estrés, disminuye el absentismo y el ambiente laboral mejora al encontrarse más tranquilos, más descansados y de mejor humor a la vuelta de las vacaciones.

Desconectar en verano es importante para mantener el equilibrio en todas tus dimensiones,  ya que según el modelo FAMES, todas están interconectadas.

8 razones para desconectar

Aquí te dejo estas 8 razones por las que deberías desconectar en tus vacaciones:

  • Vivir y cuidar tus relaciones familiares y sociales

La vida es para disfrutar, compartir y rodearte de las personas que quieres y que te quieren. 

Aprovechar las vacaciones para fomentar la unión y fortalecer las relaciones con tu pareja, hijos, padres, hermanos, familiares o amigos, es ganar en calidad de vida y en el bienestar personal.

Jugar, viajar, reír, comunicarte y realizar actividades en compañía para recargar esa energía que necesitarás durante el año.

  • Disfrutar de la experiencia

Existen estudios que demuestran que la percepción de la felicidad aumenta durante los períodos vacacionales.

Solo tienes que hacer algo diferente a lo habitual. 

Comenzar con los preparativos, ya genera en tu cuerpo esa sensación de placer que te transporta al deseo de encontrarte ya disfrutando de ellas.

Aprovechar estos días para hacer lo que no puedes hacer durante el año: disfrutar del mar o la montaña, ver una puesta de sol, realizar una lectura que tenías pospuesta, conocer algún lugar que deseas, tomar un helado, saborear una comida en calma con la familia, visitar a algunos amigos, … 

Tu sonrisa hará que las demás personas también sonrían y creará un ambiente placentero, de complicidad y conexión. Además de generar endorfinas que te ayudarán más a disfrutar de cada momento.

Hay que reír, sonreír y mostrar tu alegría. 

Valora cada momento que vives

  • Aprovechar la desconexión digital

Apagar el teléfono y desconectarse del ordenador es el mejor descanso que se puede esperar para las personas que están diariamente conectadas al mundo digital.

Es necesario realizar este detox digital y no estar pendiente de los correos electrónicos, reuniones, turnos de trabajo o de otras cuestiones laborales.

Es bueno desinstalar las aplicaciones y desconectar los avisos que tengas por temas de trabajo. 

Ser previsor con este asunto evitará que al escucharlos o verlos los relaciones con tu jornada laboral.

Además, de que es un derecho, según la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantías de Derechos Digitales, respetar el tiempo de descanso, permiso y vacaciones de los trabajadores.

  • Dormir y descansar

Durante todo el año, es fundamental para tu salud, descansar y tener un sueño reparador. Pero en estos días, dormir bien, te ayudará a recargar y recuperar tu energía mejor que nunca.

  • Hacer ejercicio físico

Es recomendable que realices actividades físicas para tu cuerpo y para tu mente. 

No por estar de vacaciones tienes que dejar de hacer ejercicio físico, al contrario. Sigue realizando tus ejercicios habituales, como caminar, correr o nadar y si vas al gimnasio puedes aprovechar estos días para realizar tus ejercicios al aire libre.

También puedes hacer alguna actividad física que te llame la atención en ese lugar donde te encuentras: surf, snorkel, escalada, senderismo, …

  • Practicar la relajación

Realizar prácticas de meditación, mindfulness o técnicas de relajación te ayudarán con tu salud mental y a equilibrar tu cuerpo y tu mente.

Si no puedes, cuando te acuerdes, mantén la atención en tu respiración, realizando alguna inhalación profunda que te haga sentir la tranquilidad y la calma que estás viviendo.

  • Conectar con el presente

Aprovechar cada momento que estás viviendo (pasear, estar en la playa, comer con amigos, …). No pienses en lo que harás después.

Sentir dónde estás y empaparte de los lugares en los que te encuentras. Disfrutar de los sonidos, de los olores, de la temperatura, del aire o la brisa, …

Puede ser normal que alguna vez se te venga a la mente algún pensamiento sobre el trabajo. 

No te enfades. 

No luches contra él. 

Solo mira a tu alrededor y siente. Tu propia mente se dará cuenta de que no es el momento y lo desechará. 

Reconectar con el presente es tener la mente en el mismo lugar que tu cuerpo. 

  • Planificar, delegar y organizar tus tareas en el trabajo

Es importante que dejes organizado todo tu trabajo para que tu mente no esté dándole vueltas a lo que tienes pendiente.

Para ello, es necesario adelantar trabajo que solo tú puedas hacer y no puedas posponer, cerrar temas, mantener conversaciones pospuestas y delegar en compañeros las tareas que ellos puedan realizar.

Otra acción necesaria para despejar tu mente es planificar tu agenda para la vuelta con los trabajos que tengas que realizar en tu incorporación.

Anotar lo imprescindible, no es necesario cargarla para no saturarte nada más volver.

Beneficios de desconectar 

Puede que pienses que no vas a ser capaz de desconectar y no eres capaz ni de disfrutar con los preparativos de tus vacaciones, o quizás no tienes “tienes tiempo” y no te permites disfrutar de esos momentos, delegando en otra persona la organización.

Lo primero que tienes que cambiar es tu actitud y realizar algunas acciones que te permitan aprovechar al máximo esos días de merecido descanso para ayudar a que tu cerebro desconecte.

En los días de vacaciones hay que desconectar, relajar la mente y disfrutar del presente para recargarte de energía.

Estos son los beneficios principales:

  • Desconectar te ayuda a reconectar

Descansar durante tus vacaciones, desconectar tu mente y reconectar con el presente que estás viviendo, te ayudará en tu vuelta al trabajo a ser más productivo.

Volverás con más fuerza, con más tranquilidad y más positividad para afrontar con otra actitud el resto del año.

Tus pensamientos habrán cambiado y serás más feliz en tu trabajo al recuperar la energía que te faltaba y conseguir el equilibrio en todas tus dimensiones: física, aspiracional, mental, emocional o social.

  • Tener mejor salud

El estrés laboral perjudica gravemente todas las dimensiones de la persona y afecta en su calidad de vida.

Es necesario cambiar los hábitos laborales para que el cerebro descanse y se centre en otras actividades que le fortalezcan.

Es importante para tu mente romper con las rutinas, olvidarse del reloj, de las prisas, de las alarmas y centrarse en vivir cada momento. 

No pasa nada por levantarse más tarde o por comer un poco después. Lo importante es aprovechar y disfrutar de lo que estás viviendo a cada instante.

También para la salud física es importante, ya que el estrés perjudica gravemente a otros órganos como el corazón. Al hacer ejercicio físico se reduce el riesgo de padecer ataques cardíacos, enfermedades coronarias y mejora la salud física en general.

Un dato importante es que el 45% de los trabajadores reconoce sufrir estrés laboral, lo que repercute también negativamente en su productividad.

No desconectar laboralmente está comprobado que  influye negativamente en la salud física y mental de las personas y favorece el desarrollo de enfermedades

Cómo superar el síndrome postvacacional

El síndrome postvacacional es el conjunto de síntomas que padecen algunas personas al reincorporarse a su puesto de trabajo después de las vacaciones.

Principalmente se trata de cansancio generalizado, alteraciones en el apetito, insomnio o dolores musculares.

Pero además de estos aspectos físicos son importantes las alteraciones en el comportamiento y en la actitud. Algunos como irritabilidad, tristeza o falta de motivación para realizar las tareas laborales.

Lo normal es que estos síntomas duren solo unos días y que poco a poco el cuerpo y la mente se vayan acostumbrando a la rutina de nuevo. 

No hay que prestarle mucha atención y sí es importante no hablar mucho de este tema, ya que las palabras lo hacen más real, y se trata de un proceso natural de adaptación.

Es bueno, en tu vuelta al trabajo, hablar con los compañeros de tus vacaciones, de lo que has vivido y de cómo te has sentido. Escucharles también a ellos, empatizar con lo que te cuentan y sonreír. Esto te ayudará a incorporarte progresivamente a las rutinas diarias y seguir sintiendo la felicidad de esos momentos. 

Puedes seguir con tus rutinas de relajación o mindfulness y realizar algunas pausas para agradecer y sentir cada momento que estás viviendo.

Este síndrome vacacional se apoya en la sensación de haber vivido unas vacaciones cortas, de no haber disfrutado a fondo y de no haber desconectado lo suficiente. 

Por eso es importante tomar en serio tus vacaciones y seguir todas las recomendaciones, que apoyamos con el modelo FAMES, y que te hemos compartido.

“En SpinYourTalent ayudamos a las personas y a las empresas a potenciar su energía para conseguir sus objetivos”

Quiero potenciar mi energía